Internet: faltan palabras para describir su magnitud, difusión e importancia. Hoy que oficialmente se cumplen 25 años del nacimiento de la World Wide Web. Lo que ha cambiado todo…
Diseño y desarrollo web: una interminable e inabarcable sucesión de estándares (recomendaciones), herramientas de desarrollo, gestores de contenido, librerías, plugins, actualizaciones, novedades tecnológicas, dispositivos, sistemas operativos, navegadores, tendencias, opiniones, técnicas, configuración, usuarios,…
Cambio, evolución transformación,… tal vez sean los términos que mejor definen el desarrollo web. Y sin embargo, el concepto que siempre me ha parecido más interesante es el de universalidad. Y por afinidad, el de accesibilidad.
Es bastante conocida la frase que titula el artículo de Eduardo Manchón en Alzado Diseñar para lo más probable y no para todo lo posible, que en el contexto original hace referencia al diseño de interfaz sirviéndose de los usuarios y las tareas. Siempre he pensado que desde el punto de vista de desarrollo web (del código, para entendernos) podría verse complementado con un anexo:
En el desarrollo web, diseña para lo probable, pero ten en cuenta lo posible.
Porque desde el punto de vista de negocio (perder posibles clientes) o de los usuarios (discrimarlos) es una irresponsabilidad que no se pueda acceder a los contenidos de una web o interactuar en ella.
Y llegamos al artículo Device-Agnostic que, partiendo de dos evidencias actuales —la web móvil y los dispositivos táctiles—, expone una forma de enfocar el diseño web con el que estoy bastante de acuerdo:
The more I build for the web, the more the term ‘device-agnostic’ endears itself to me.
I used to think it merely dealt with basing responsive breakpoints on content rather than particular devices, but there’s more to devices than the size of their screens. A device-agnostic approach also takes into account infinite combinations of screen resolution, input method, browser capability, and connection speed.
With such a wide range of possibilities, the sensible thing to do is to zero in on the harshest conditions (or toughest things to deliver) and build from there. Like cars designed to perform in extreme heat or on icy roads, websites should be built to face the reality of the web’s inherent variability. In my mind this approach addresses the following from the beginning:
- Hostile browsers
- Tiny screens
- Slow connection speeds
- Touch inputs
[…]
Recomiendo su lectura y agradezco a mcdave que lo haya compartido en Device-Agnostic | Trent Walton.